Estos buñuelos salados son ideales para la cena y para reciclar las sobras de arroz que tengas en la nevera

Como plato principal acompañados de una ensalada fresca o como guarnición, los buñuelos son muy versátiles

buñuelos
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Si bien el término "buñuelo" nos lleva irremediablemente al mundo dulce, como los buñuelos de viento o los tradicionales buñuelos de Cuaresma y Semana Santa, también podemos prepararlos en versión salada, y son estupendos como recurso para aprovechar sobras que tengamos en la nevera.

Una opción vegetariana son los ricos buñuelos de arroz y queso. Presentados en pequeñas porciones, son bocados de lo más ricos y especiales para la hora de la cena, y resultan perfectos también como alternativa a la hora del aperitivo con diferentes salsas y untables para mojar.

Es una receta fácil y además rendidora, pues con unos 180 gramos de arroz redondo hervido es suficiente para cuatro personas. Si bien la masa de base no lleva vegetales, son bien recibidas si se pican finamente y se integran. Lo mismo con hierbas frescas o especias, para personalizar el sabor y hacerlos aún más irresistibles.

Son además excelentes para aprovechar el arroz blanco de otras comidas. El paso a paso de los buñuelos comienza batiendo el huevo junto con el agua. Luego, se debe agregar la harina y remover con unas varillas hasta que no queden grumos. Para una versión sin gluten, se puede utilizar harina de arroz.

Llega el momento de incorporar el arroz, el pimentón y el queso rallado, usando las especias a nuestro favor y condimentando generosamente. Hay que dejar reposar la mezcla durante unos 30 minutos y freír los buñuelos en abundante aceite bien caliente en pequeñas cantidades, para que no se nos peguen. El éxito de los buñuelos está en la temperatura del aceite. Para comprobarlo, hacer una pequeña bolita y echar al aceite cuando calcules que está caliente. La bolita debe durar unos 15 segundos en el fondo antes de flotar.

Cuando estén listos los buñuelos, retirar con ayuda de una espumadera y escurrir el exceso de aceite con papel absorbente. Así ya los puedes servir. Ideal recién hechos y tan calientes como te sea posible, para que no pierdan la textura crujiente del exterior. 

En DAP | Mini buñuelos de queso gruyer

En DAP | Buñuelos de verduras

Inicio